Está claro que vivimos en la era de la información, informática, conocimiento, etc, pero es curioso como a veces, y probablemente, al estar tan saturados de datos, Facebook, twitter, internet, foros, clubes, grupos, etc etc., podemos llegar a perder la ilusión y la responsabilidad de conocer aquello en lo que estamos trabajando o disfrutando. Éste es también el caso de algunos nuevos propietarios de perro lobo checoslovaco.

Dicen que hablando se entiende la gente,  estoy de acuerdo, ésta saludable costumbre del dialogo verbal se está perdiendo a favor del medio escrito y no tan favorable. Es por ello que a menudo puedo hablar con algunos de esos nuevos propietarios y me doy cuenta de la realidad que en ocasiones no vemos. Es cierto que existe un grupo mas o menos copioso que está bien informado sobre la raza, evoluciones, criaderos, enfermedades, etc, pero existe otro número también numeroso que aún siendo propietario de un plc desconoce muchos aspectos, caracteres, morfología y sobre todo de las enfermedades que atañen a nuestra especie. Poco a poco va habiendo más gente que cruza perros para vender cachorros, la mayoría no me atrevo a llamarles criadores aunque etimológicamente lo sean, que unas veces por desconocimiento, otras por rentabilidad y otras por intereses personales realizan estos cruzamientos sin ningún tipo de información, ni de salud, ni de genética ni de nada, pero que además consiguen vender sus productos a unos ilusionados pero desinformados nuevos dueños. Esta cadena cada vez es más larga y aprieta lo suficiente como para ver ahogados los esfuerzos de aquellos que siendo responsables hacen todos los esfuerzos por mejorar la raza.

Hay que recordar que después de conocer la raza por primera vez y quedar flaseados por ella, el paso siguiente no es el de comprarse un perro, sino más bien, el de la información y la formación para en algún momento poder tenerlo y tener tanto dueño como perro una vida en compañía con plenas satisfacciones.